¡Lleve su alegría de a peso!
Por fin encontré el cadáver desaparecido de mi felicidad, fue destazado y ahora se vende por un peso en los vagones del metro...
Texto e Imagen: Inflamadorate Junio 2005
Trazando onírica ruta donde se pierden gajo a gajo tus escamas salitrosas...
clinc, clinc, clinc, clinc, clinc... -¡fuck! bang, bang...
Vagabundo, hedonista y paranoico; fanático del paroxismo lírico y de la vocalización cunnilingue; amante proceloso y aprendiz de poeta rabioso...
Viví – vivo – viviré en el exilio, desde el destierro primo del útero materno hasta el certero concubinato con la muerte...
Mientras tanto, aquí está la descripción de mis andares serpentinos; todo lo demás, francamente me importa un pito...
4 comentarios:
Estoy intrigada... tal vez voy a comprar un trozo del cadáver sin saberlo.
Un abrazo
Pues tendrás que ser precavida Cristal, parte primero el alajú para ver si el cadáver forma parte de él…
Pero si lo prefieres, arriesgate...
uff no había leido el título... excelente! Te queda a reconstruir lo que había desapareció... o recorrer los vagones del metro :)
Un abrazo
Así es Cristal, no queda de otra, un abrazo...
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